Boadella decía con atino que la sociedad catalana estaba mentalmente enferma y, claro, los separatistas se molestaron, porque en su cabeza sólo ellos son la sociedad catalana, los demás, como diría la Presidenta del Parlament Carme Forcadell, somos «el enemigo». Dentro del separatismo, hay un tipo de persona fanática que vive el Procés como un acto legítimo de lucha de un pueblo oprimido que pide libertad. Curiosamente, Catalunya es el único lugar del mundo donde los burgueses son los oprimidos y los obreros los opresores, pero casi cuarenta años de adoctrinamiento llevan a que cuestiones como esa puedan ocurrir.
Sin embargo, la mayoría de las personas que votan a formaciones que han apostado por el separatismo tienen otro perfil más moderado. Sienten que a Catalunya se la trata con injusticia y que eso es algo que les hace, moralmente, tener el derecho al menos a un referéndum. El problema que…
Ver la entrada original 595 palabras más