Es duro perder un ojo por un pelotazo en una manifestación. Pero ello no justifica utilizarlo como propaganda contra la policía. Y menos se justifica cuando la versión victimista no tiene nada que ver con la realidad.
Es duro perder un ojo por un pelotazo en una manifestación. Pero ello no justifica utilizarlo como propaganda contra la policía. Y menos se justifica cuando la versión victimista no tiene nada que ver con la realidad.