La publicación republicana «La madeja política», presentaba este más que significativo gráfico. La república unitaria, jacobina y uniformizadora, cortando el árbol de Guernica. Hoy la izquierda se las da de defensora del derecho la diferencia.

Todo mentira. La izquierda de antaño aborrecía lo que representaba el árbol de Guernica: los fueros, el derecho a una sociedad organizada subsidiariamente y no desde el Estado, una sociedad aún cristiana de cuyos caseríos manaban los defensores de la tradición frente a una Revolución deshumanizadora e individualizante.

De ahí su odio a la diferencia. Ahora se las dan de amantes de los «hechos diferenciales» y de los nacionalismos. Precisamente porque el nacionalismo es el falsificador de la verdadera diversidad y diferencia.